Italia 1934

La segunda edición de la Copa del Mundo, organizada por la Italia fascista de Benito Mussolini, terminaría dejando más dudas que certezas. Un sistema de eliminación directa que abolió la fase de grupos utilizada cuatro años antes le restó emoción a un torneo que tuvo las eliminatorias más increíbles, con métodos poco ortodoxos, jamas vistas. Arbitrajes extremadamente permisivos dando lugar a batallas campales dentro del terreno de juego y el primer ¨Gol de Oro¨ de la historia, a pesar de que todavía no existía esa regla. Bienvenidos a Italia 1938..

Superados los problemas de la Primera Guerra Mundial, Europa estuvo dispuesta a ser la sede de la segunda Copa del Mundo para 1934. A pesar de que en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1932 no hubo fútbol, Alemania los incorporó en Berlín 1932 pero solo con jugadores amateurs, por lo que el torneo organizado por la FIFA en Italia 1934 volvió a ser la máxima competencia internacional.

Dado el gran interés de varios países por ser parte de la cita se determinó un sistema clasificatorio algo inusual. Del continente americano consiguieron los boletos Argentina, Brasil y Estados Unidos. La Celeste y Blanca debía medirse con Chile pero bajó su candidatura. Luego el conjunto trasandino tomó la misma medida por lo que los argentinos reconsideraron su decisión y terminaron viajando. La Verdeamarelha tenía que enfrentar un mano a mano ante Perú, pero Los Incas se retiraron antes de tiempo. El pasaje de los Yankees fue sin dudas el más insólito. Cuba y Haití se enfrentaron a tres partidos donde el ganador global enfrentaría a México en otros tres partidos. Tras la victoria de Cuba frente a Haití, los mexicanos se impusieron a Cuba, y jugaron una final única ante los Estados Unidos, en Roma, los días previos al Mundial.

El resto de las eliminatorias europeas no fueron menos insólitas. En el Grupo 1, Suecia derrotó a Lituania y Estonia, por lo que estos últimos, ya eliminados. nunca llegaron a enfrentarse. En el Grupo 2, España le ganó los dos partidos a Portugal. En el Grupo 3, Italia derrotó a Grecia, en Milán, y el partido revancha nunca se llevó a cabo. El Grupo 4, que contenía cuatro participantes, clasificó a Hungría por ganar sus dos partidos y a Austria por derrotar a Bulgaria (Dinamarca no llegó a jugar ningún encuentro). En el Grupo 5, Checoslovaquia derrotó a Polonia como visitante, pero no hubo partido revancha. El Grupo 6 clasificó a Suiza y Rumania, dejando afuera a Yugoslavia (Noruega se retiró). Holanda y Bélgica lideraron el Grupo 7, relegando al por entonces Estado Libre de Irlanda (hoy República de Irlanda), y el Grupo 8 clasificó a Francia y Alemania, dejando afuera a Luxemburgo y Letonia.

Egipto, que había quedado afuera de Uruguay 1930 porque la FIFA no aplazó el comienzo del Mundial para que pudieran realizar el largo viaje en barco, tuvo esta vez su oportunidad y no la desaprovechó. Se impuso en un mano a mano frente a Palestina por 7 a 1 y 4 a 1.

El gran ausente, lógicamente, fue el plantel uruguayo que se negó a participar porque Italia no había aceptado la invitación Charrúa cuatro años antes. De esta manera, Uruguay es el único país que por única vez no defendió su título de campeón, en la historia de los Mundiales (Sí lo hizo en Suiza 1954 tras consagrarse en Brasil 1950).

Otro detalle no menor fue que todos los partidos de Octavos se jugaron el mismo día, a la misma hora. Lo mismo sucedió con los partidos de los Cuartos y la Semifinal.

OCTAVOS DE FINAL

A diferencia de Uruguay 1930, para Italia 1934 se optó por un sistema de eliminación directa de ocho llaves entre los 16 clasificados. Este sistema se volvería a usar únicamente en Francia 1938, ya que para Brasil 1950 se volvieron a dividir en zonas.

El más abultado de los resultados fue el 7 a 1 con el que Italia despachó a los Estados Unidos (hat-trick de Angelo Schiavio). La otra goleada, por 5 a 2, fue la de Alemania ante Bélgica (hat-trick de Edmund Conen).

En el resto de los partidos España derrotó por 3 a 1 a Brasil, Hungría por 4 a 2 a Egipto, y Checoslovaquia por 2 a 1 a Rumania. Tres partidos terminaron con el 3 a 2 en el marcador: Austria a Francia, Suiza a Holanda y Suecia ante Argentina.

CUARTOS DE FINAL

En Cuartos de Final no se sacaron grandes diferencias. Alemania derrotó a Suecia por 2 a 1, mismo resultado por el que Austria se impuso ante Hungría.

El partido que más emociones tuvo fue sin dudas el que disputaron Checoslovaquia y Suiza. Los oriundos de los alpes comenzaron arriba en el marcador pero los checos empataron antes del complemento y pudieron darlo vuelta al comienzo de la segunda parte. A 12 minutos del final Suiza consiguió la igualdad, pero cuatro minutos más tarde Oldrich Nejedly le dió la victoria final a Checoslovaquia.

El primer alargue en la historia de los Mundiales ocurrió entre Italia y España. Cuando el 31 de mayo de 1934 igualaron por 1 a 1 en el Stadio Giovanni Berta (hoy Artemio Franchi) de Florencia, se disputó una prórroga de 30 minutos, pero sin poder convertirse goles. Aquel encuentro quedó en la memoria colectiva como la ¨Batalla de Florencia¨, por la cantidad de agresiones entre los jugadores de ambos planteles. De hecho, el tanto de la igualdad se dio porque Schiavio golpeó dos veces al portero español Zamora, quien no pudo despejar un centro y así Ferrari solo tuvo que empujarla a la red.

Al no haber definición por penales se disputó un nuevo encuentro al día siguiente en el mismo terreno. El partido anterior había sido tan violento que 7 de los 11 titulares españoles no pudieron dar el presente en el segundo match. El único gol del partido lo terminó convirtiendo Giuseppe Meazza para darle la claificación a los italianos.

SEMIFINALES

En el viejo Stadio Nazionale del Partido Nazionale Fascista (demolido luego en 1952) se convirtió el tercer y último hat-trick del Mundial. Oldrich Nejedly, quien terminaría siendo el goleador del Mundial con 5 tantos, convirtió los tres tantos con los que Checoslovaquia se impuso ante Alemania por 3 a 1.

La otra semifinal fue para el conjunto local, por la mínima diferencia, gracias al tanto del argentino Enrique Guaita, en el Stadio San Siro.

TERCER y CUARTO PUESTO

A pesar de haberse quedado afuera de la Final, alemanes y austríacos dieron una gran exhibición de fútbol. Al minuto de juego los germanos se pusieron en ventaja y ampliaron la diferencia antes de la primera media hora, pero sesenta segundos más tarde descontó Austria. Sobre el final de la primera parte Alemania volvió a estirar la ventaja y en el complemento el plantel austriaco volvió a ponerse a tiro pero no fue suficiente. Alemania venció por 3 a 2 y coronó un gran debut Mundialista con medalla.

FINAL

El partido que enfrentó a Italia con Checoslovaquia por la Final del Mundial fue tal vez uno de los más desesperantes de su historia para la afición local. Bajo el regimen fascita de Benito Mussolini, quien necesitaba de manera imperiosa el título de sus compatriotas para mantener en alza la moral del pueblo, se disputó una de las finales más agónicas y polémicas en cuanto a su definición. Los italianos no podían vencer el arco rival a pesar de la evidente ayuda del árbitro sueco Iván Eklind y para colmo de males, a 15 del final Antonín Puc pone el 1 a 0 para los visitantes. La cabeza de los jugadores italianos, que volvían a ponerse en peligro, volvieron a ser salvadas por obra y gracia de otro argentino: Raimundo Orsi alcanzó la igualdad cinco minutos más tarde.

La polémica llegó en el tiempo extra. A los 5 minutos de prórroga, Schiavio convierte para Italia, poniendo lo que sería el 2 a 1 parcial, y el árbitro pita automáticamente el final del encuentro e Italia campeón. Por primera vez se definió con el sistema, conocido años más tarde, como Gol de Oro.

Escrito por Germán Picotto | Instagram @gerseventyseven